24 junio, 2009

Más raro que un hielo caliente

Hola queridos lectores:

Hacía tiempo que no me pasaba por aquí, espero que no os hayais sorprendido, yo lo avisé, soy novelero y vago, dos adjetivos que provocan un cierto aburrimiento o desdén para hacer cosas con una cierta continuidad. Pero debido a hechos recientes esta actualización la voy a hacer con más ilusión que cuando tu maestra de primaria te dejaba la maquinita para hacer agujeritos en los folios.

He estado varios días meditado y creo que el calor me ha provocado un deshielo en mis neuronas haciéndome pensar cosas sin sentido (ay, no, que eso lo hago siempre), anyway, la conclusión es que he estado pensando en cosas raras como por ejemplo: un hielo caliente.

¿Qué me decís con respecto a cosas raras? Estamos rodeados de cosas raras, solo que no nos damos cuenta, aparatos que enfrían pero que a su vez calientan el medio ambiente, más de un español de pueblo cerrado que se suicidaría para reencarnarse en un nipón y cómo no, las tiendas de todo a 100, que mira si son raras que llevamos casi 10 años con el euro y todavía le seguimos diciendo "La tienda de los 20 duros".

Las tiendas de 20 duros tienen la capacidad de ir mutando con respecto pasen los años, cunado yo era pequeño sólo vendían juguetes y cosas así, ya incluso venden pan; pero todas, y esto ocurre siempre, tienen un factor en común: "Sea lo que sea, lo que haya dentro parece que pierde la calidad", da igual que vendan trajes de gitana de Victorio & Luccino originales, que silo cuelgas allí parecerán que son una mierda. Y como eso todo, discos, bolígrafos, incluso condones.

El problema de esto es que no todas las cosas son fiables, esto siempre ha ocurrido, nadie te da garantía por un objeto comprado en una tienda de todo a cien. Luego surgen las desgracias, como por ejemplo, cuando compras los citados condones, que ya no solo te quedes embarazada, sino que además, por haber pasado el semen por una sustancia que a ver qué dios la ha tocado salen malformados.

Estos mal formados podemos catalogarlos en dos grupos, a saber: frikis (también Freaks, Friquis o Freakies) y desgracias.

Los Frikis: creo que no necesitan explicación, estamos en una sociedad tan poco patriota (no quiero parecer facha), en la que se cree que todo lo de afuera es mejor que lo de aquí. Toque de atención: Las sevillanas son dos pasos, a lo sumo tres, ¿por qué os empeñáis en aprenderos bailes con más pluma que el nórdico de Little Nick y que solos irve para una canción?

Desgracias: Pues las desgracias son enjendros que viven en nuestra sociedad y que su única motivación en la vida es... Bueno, no tienen motivación, ¿para qué vamos a engañarnos? ellos viven, se aparean como medianamente puede y luego cuentan lo que le dan la gana. ¿Para qué contar la verdad, si la mentira me hace más ridículo? Pues ellos son así, el 90% de su, llamémosle, enfermedad es debido a los factores anteriormente dichos, más bien al factor, el 10% restante se debe a el hecho de haber ingresado en muy prematura edad en asociaciones como los Scouts.

Para terminar, un mensaje a todos los que no quieran ser padres padres que no querían ser padre, pero tampoco se preocuparon mucho, tal y como los padres de las desgracias. Comprad condones buenos de calidad, serán caros pero pensad que más caro será cuando vuestros hijos vengan pidiéndote dinero para comprarse escuditos para los Scouts, le pegues dineros para la matrícula de su universidad que luego decidirán no ir y cambiarse a otra carrera o si pierden el móvil porque es tan infantil que no sabe controlarse bebiendo, PENSAD.

Póntelo, pónselo...pero con calidad.

Álvaro Durex van Control Active

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